18.12.05
Noche de paz… En Guerra
LA MEJOR ESCENA DE LAS CASI 4 HORAS de Gods and Generals (Ronald F. Maxwell, 2003) es muy sencilla: dos soldados enemigos cruzan el río que los separa, intercambian un cigarrillo y una bebida y durante largos segundos se miran a los ojos.
Es Navidad. Se escucha “Silent Night”.
De esa escena no tengo foto de Google, IMDB o site oficial. Pero sigue siendo, para mí, la más llena de significado.
Gods and Generals es una portentosa y minuciosa recreación cinematográfica de las primeras batallas de la Guerra de Secesión estadounidense. Es extensa e intensa, no da tregua al espectador, presenta las batallas con un realismo al mismo tiempo agotador, fascinante, arrebatador visualmente. Literalmente, la imagen de la guerra. Forma parte de una trilogía que espero ver completa algún día. Del soundtrack les recomiendo “Going Home” de Mary Fahl que se puede escuchar en .mp3 y .ram en la Web.
En aquellos tiempos de guerra fue cuando Teresa Carreño se fue de Venezuela rumbo a Filadelfia, por allá por 1862. Teresita, quien desde los 8 años se volvió una megaestrella y conquistó a los "yanquis" con su talento de niña prodigio.
Sobre esta época se puede ver también Regreso a Cold Mountain (Anthony Minghella, 2003). (Buena cinematografía y romance, es la historia de Ada Monroe (Nicole Kidman) quien espera tortuosamente a su Inman (Jude Law), un soldado confederado señalado por una trágica premonición).
Con el trasfondo de la guerra civil tampoco puede faltar Lo que el viento se llevó (Gone with the Wind – Victor Fleming, 1939). (La historia de Scarlett O'Hara, protagonista de la novela de Margaret Mitchell filmada en Technicolor y transformada por Hollywood en entretenimiento puro en medio de uno de los capítulos más trágicos de la historia). Por cierto que Lo que el viento se llevó se estrenó en Caracas en el Cine Ávila el 12 de Septiembre de 1940.
Si realmente el tema los engancha, está el hito del cine mudo El Nacimiento de una Nación (The Birth of a Nation - Griffith, 1915) que, entre otras cosas, presenta heroicamente el terrorismo del Ku-Klux Klan y una famosa escena del asesinato de Lincoln.
Películas amadas, odiadas y controversiales, nunca ignoradas. Entre las tantas que se pueden ver sobre la Guerra de Secesión.
Me gusta pensar que Teresa Carreño fue un bálsamo de espiritualidad en aquellos tiempos de aquella oscura guerra entre hermanos.
Nuestra megaestrella venezolana, Teresita, quien brilló en el Norte del Norte y tocó para Abraham Lincoln en la Casa Blanca.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)