27.2.06

Dark Movies: Deprimentes imperdibles

La Caída (De Untergang, 2004) es una película deprimente.
Sin embargo, no me arrepiento de haberla visto pues es una recreación de los hechos y la atmósfera de los últimos días en el búnker de Hitler, su suicidio y el de sus incondicionales. Suficiente estímulo informativo para ver un testimonio fundamental que nadie, nadie se debería perder.

Actuación impecable de Bruno Ganz. Su caracterización es completa, desmonta la imagen del invencible y presenta un hombre vencido, amargado, paranoico, tembloroso, que alucina, sorberbio pero patético, que inspira asombro por su absoluto desvarío, inspira repudio por el desprecio abierto con el cual se expresaba de su propio pueblo, e inspira desconcierto pues algunos sectores de la humanidad, a estas alturas, a veces parecieran ignorar la lección.

De verdad la recomiendo. No es entretenimiento. Me dejó con dolor de cabeza, pero reafirmada en mi convicción de que el cine es un medio poderoso y disponible para exorcizar demonios.

Hay películas que son horribles. Nunca las recomiendas cuando te preguntan, porque no son divertidas y quién es uno para arruinarle la velada a otro con una peli que, por muy buena que sea, es mucho más que triste o aterradora. Pero la verdad es: hay excelentes películas, que son absolutamente deprimentes. Una vez de visita por el Museo de Madame Tussaud, en Londres, vi a un Hitler de cera custodiando la entrada de la cámara dedicada a la maldad, la tortura, la muerte y el horror. Igualito que Dr. Jekyll y Mr. Hyde, el cine es tanto luz como oscuridad.

Bien, esta es mi lista de películas deprimentes. Es una lista para ir al lado oscuro, tenebroso, de la vida, que lamentablemente existe y a veces toca visitar. Esa mazmorra donde mantenemos presos los temores y recuerdos más dolorosos: The Life of David Gale, House of Sand and Fog, La Flaqueza del Bolchevique, Elephant, The Hours, Open Water, We don’t live here anymore, La habitación del hijo, Ordinary People, Dancer in the Dark, 21 gramos, En el Nombre de Dios, Monster, Kadosh, L' Emploi du Temps, Mystic River, The Woodman, The Shining, El Regreso, Dolores Clairbone, El Silencio de los Inocentes, Amores perros, The Passion of the Christ. Safe.

19.2.06

Munich + Promesas








Mientras veía Munich (Steven Spielberg, 2005), un drama/thriller sobre la Masacre terrorista de las Olimpíadas de 1972, en Alemania, recordé el documental Promesas (Promises, Carlos Bolado, B.Z. Goldberg, 2001), una de las experiencias cinematográficas que más me conmovieron en los últimos dos o tres años.

Aunque completamente distintas, las une el tema del conflicto árabe-israelí y la manera como gritan al espectador cuán devastador es para el alma humana el odio aprendido que separa a los pueblos.

Véanlas en combo, Munich y Promises, y si como yo no están familiarizados con los ángulos históricos, religiosos, culturales y etc. del conflicto árabe-israelí, al menos después de ver este par de buenas películas, contarán con una buena idea de lo que pasa a nivel humano, en la piel de quienes los viven día a día. En Promises, lo harán a través de un grupo de niños/jóvenes judíos y palestinos que entran en contacto gracias a un experimento cinematográfico que diría resultó exitoso.

Munich me pareció una obra bien tejida, narrada con la calma suficiente y un pulso de veterano: aunque no me conecté emocionalmente al mismo nivel que lo hice con Promises, pienso que Munich tiene una narración absorbente y plantea reflexiones sobre las emociones viscerales que genera la guerra de este siglo: el terrorismo.

El personaje Golda Meir, breve, contundente, preciso, llamó especialmente mi atención. Con respecto a la recreación de los hechos, me pareció una decisión interesante que fragmentaran el relato crudo de la masacre (ésta no se presenta de una sola vez al principio, por ejemplo, sino que se esparce y reitera a lo largo de la película), porque de esa manera sirve como recordatorio de la motivación honda (sed de venganza, ¿sed de justicia?) que mueve a estos cinco elegidos para la operación Cólera de Dios.

Vayan a verla y conviene leer un poco sobre los hechos reales antes, para captarla mejor. Y después, vean Promises, que les va a gustar.

5.2.06

Italian for beginners: Entrándole al Dogma 95


La ví en tres partes, digamos que un fin de semana algo complicado me impidió sentarme a verla de una sola vez: pero en cada sesión, sin darme cuenta me iba dejando atrapar por el encanto discreto de esta película danesa. Y en cada sesión me sonreía sin darme cuenta.

Italiano para Principiantes (Italiensk For Begyndere, 2000 - Lone Scherfig) es una comedia romántica, diferente en su género pero igual en su intención de entretener, diferente porque fue creada con el estilo del Dogma 95, igual porque incluye un final feliz, casi perfecto, que de alguna manera nos inspira y protege temporalmente de la tristeza. Sus protagonistas no son glamorosos o millonarios que viajan a París o a Nueva York a jurar amor eterno: son seres normales y corrientes, tímidos, torpes, rutinarios, malgeniosos, solitarios, todos en búsqueda de un romance.

Las películas filmadas de acuerdo al Dogma 95 deben ser filmadas en escenarios naturales evitando las escenografías armadas en los estudios, con cámara en mano o al hombro, grabada con sonido directo y sin musicalizaciones especiales.” He visto dos películas de uno de los fundadores del Dogma, Lars Von Trier, Dogville y Dancer in the Dark, las cuales en su momento me produjeron gran impacto y curiosidad. Pero la primera “certificada” que veo es Italian for Beginners, y puedo decir que mi curiosidad aumenta.

Definitivamente, la recomiendo a quienes busquen algo ameno y diferente: es una película donde “no pasa nada” pero refleja la vida, y es grato acompañar a estos 9 personajes transitar por su soledad cotidiana en una urbe de Europa y su búsqueda de contacto humano, amor y emoción, con románticas escenas en Italia incluidas. Inevitablemente conmovedora.

1.2.06

Cine gratis: In Her Shoes














Qué maravilla eso de entrar al cine pagando con puntos en lugar de cash. Esta vez lo hice con En sus zapatos (In her shoes, 2005 – Curtis Hanson) y resulta que me interesó más de lo que esperaba. Creía que iba a ver una comedia, que probablemente sería buena (¿si no qué hacía ahí Toni Colette?) y que igual me iba a gustar porque no niego que disfruto los “chick-flicks” ("películas para mujeres").

In her shoes tiene elementos característicos: dos hermanas, una bella, otra fea, una frívola, otra responsable, junto a una abuela sabia que se encargará de darles una que otra lección. Ahora bien, lo divertido es que estos clichés iniciales son sólo una forma de invitar, A QUIEN PUEDA INTERESAR, a transitar un rato por los pliegues de una no muy fácil historia familiar. Y para mayor colorido, se consigue uno con elementos adicionales que también aportan su encanto, como un amable restaurancito jamaiquino y, especialmente, unos señores de la tercera edad que son retratados con mucha sensibilidad y sentido del humor.

El rompecabezas de la familia se va completando, eventualmente se revelan secretos que explican los roles y actitudes de estas dos hermanas, y resulta grato explorarlos. In her shoes es básicamente un drama, pero eso no lo quita sus carcajadas. Es una película reposada, cada personaje tiene su momento y deberá o querrá calzarse los zapatos de otro, temporalmente, para madurar y evolucionar. Habla de transformación personal y liberación de telarañas y cargas así como de roles autoimpuestos desde la infancia.

De alguna manera al final de las dos horas y pico que dura, uno siente que efectivamente se quita un peso de encima, como es evidente que le sucede a sus personajes. Excelente Toni Colette (como siempre) Cameron Díaz trabaja bien a su personaje y qué decir de Shirley McLaine, una veterana que sabe muy bien cómo administrar serenamente a esta abuela a quien la vida le regala una segunda y crucial oportunidad.

(Un momento especial de la película tiene que ver con el poema de Elizabeth Bishop "One Art" y en este link pueden escucharlo.)